Hace unos días estaba reunida con unas amigas y empezamos a platicar sobre lo que hemos aprendido en estos años de casadas. Veíamos con claridad que las expectativas con la que nos habíamos casado cada una habían cambiado con los años, principalmente porque lo que nos habíamos imaginado era un cuento de hadas y no un matrimonio entre dos seres humanos imperfectos. Estábamos esperando que una persona real y limitada cumpliera con nuestros sueños irreales, lo cuál era imposible. Para hacer las cosas más complicadas no alcanzábamos a visualizar que nosotras tampoco éramos perfectas. Esto provocó que cada una viviésemos una serie de dificultades que se pudieron haber evitado o manejado de mejor forma, si hubiésemos sido mas realistas.
Lo más cómico es que a todas nos tomo unos cuantos años asumir la realidad y aprender a ser feliz con ella. Esto no quiere decir que las contrariedades ya no existen, simplemente que nuestra forma de ver todo, ha cambiado. Hemos madurado en el proceso.
Comparto contigo algunas de las cosas que hemos aprendido en estos años.
- No tomarnos tan en serio. El sentido del humor es muy importante, hay veces que una discusión puede quedar terminada con una sonrisa o un chiste.
- Ser muy empáticos. Tener la disposición de ponerme en los zapatos de mi cónyuge. Algunas veces no logramos ver los problemas desde su óptica y así es difícil de entender lo que el otro puede estar atravesando.
- Creer que el matrimonio es algo por lo que vale la pena luchar porque es un proyecto de vida en común.
- No dejar que la rutina se establezca, es importante ser creativos para no caer en ella. Nunca acostumbrarnos el uno al otro: que no falte el beso de buenos días, el abrazo de despedida, el saber estar pendiente del otro.
- A perdonar y a pedir perdón, esto se dice fácil pero cuesta mucho y en algunas ocasiones cuesta más que en otras.
- Saber que te vas a llevar decepciones pero que siempre son muchas mas las alegrías. Lo que pasa es que lastimosamente lo malo tienen mayor resonancia y tenemos que aprender a dar gracias y valorar todo lo bueno. Si ponemos verdadero afán todo se soluciona para bien.
- Apreciar los detalles: el abrazo en el momento oportuno, una sonrisa, el guiño del ojo, un te quiero, aquella llamada para saludarse a media mañana.
- Esforzarme por saber que es lo que el otro necesita, al mismo tiempo no esperar que adivine lo que yo necesito, decírselo con claridad. Algunas veces será darle su espacio a solas, otras el escucharle.
- Las crisis son reales, existen. Estas nos ayudan a ser mas fuertes y mejores personas y esposos.
- A dejar mi «yo» de lado para convertirnos en «nosotros».
- Que los hijos son la personificación de nuestro amor.
- No hay nada de malo en tener opiniones distintas, sin embargo si es cierto que si están de acuerdo en lo que consideran fundamental, tendrá menos discusiones.
- Asumir que hombres y mujeres por naturaleza somos muy distintos en el ser y en el hacer. Esto nos evitará muchos problemas y ayudará a que comprendamos mejor al otro.
- Aceptar que ni uno de los dos somos perfectos. Aprender a amar a pesar de los defectos de el otro, que no es lo mismo que amar sus defectos.
Para terminar quisiera hacerlo con esta frase tan cierta:
El matrimonio perfecto esta compuesto por dos personas imperfectas que niegan a darse por vencidas.
¿Y tu, que has aprendido en estos años que llevas de casada (o)?
Post Data. Cuando le enseñe este artículo a mi esposo para que lo revisara (el es mi mejor crítico) aprovechó para agregarme unas ideas de las arriba escritas. Luego me dice: Vane estoy de acuerdo con todo, creo que ambos hemos aprendido mucho y todo lo que nos falta por aprender….. Creo que esa es la actitud correcta.
Me encantoooo!
A compartir con mi esposito
¡Me alegro Rebe!
Excelente post!! Son consejos que pueden ayudar mucho a los matrimonios.
Gracias Lucy!
Super bien, agregaría que la única formula de la felicidad es Dios, y que cuando Dios es el fundamento de nuestro matrimonio y de nuestra familia todo es mejor!
Gracias Lili!
Vane!! Me parece bien acertado!!! Gracias por compartir
Que bueno Christianne. Gracias a ti.
Antes que nada muchísimas gracias y muchísimas felicidades por compartir tan excelentes consejos, a pesar de mi edad aún estoy soltero pero comparto todo. Soy de los que piensa que el matrimonio es una bendición y debe verse con una óptica realista solo así se puede amar verdaderamente y podemos empezar a amar. Me llevo cada consejo tan valioso y algo muy importante, creo que Dios es todo en el matrimonio. No hay mejor manera de vivir el matrimonio que tomados ambos de la mano de Dios.