¿Por qué son importantes las rutinas para los niños?
Por que entre más hagan hagan los niños por si mismos, más motivados y capaces se sienten.
Una de las formas mas poderosas para poner límites es crear ruinas. Les da una guía a nuestros hijos de lo que deben de hacer y lo que se espera de ellos. El problema es que a veces las rutinas que se crean no son las que nosotros deseamos. Por ejemplo: Por las mañanas regañamos, amenazamos, gritamos para que se alisten para ir a la escuela; en las noches batallamos media hora para que se laven los dientes y una hora para que se acuesten. ¿ Además sentimos que nos toca hacer todo el trabajo en casa y lo resentimos?
La creación de rutinas te pueden ayudar, con estas se logra equidad, espontaneidad y creatividad para todos los miembros de la familia. Con la adecuada elaboración y seguimiento de estas, la Disciplina Positiva elimina las luchas de poder y les da a todos y cada uno, formas de pertenecer y contribuir en la familia.
¿Qué les aporta a los niños el cumplir con rutinas?
Los niños obtienen múltiples beneficios cuando se acostumbran a seguir una rutina. Algunos son:
- Les da seguridad y confianza en si mismos.
- Aprenden nuevas habilidades y les refuerza las que ya tienen.
- Aprenden a enfocarse en la necesidad de la situación.
- Haciendo lo que se necesita porque el se comprometió a ello.
- Responsabilizarse de la propia conducta.
- Aprenden a cooperar en su familia y para el beneficio de esta.
- Los hace generosos y les enseña a servir a los demás.
- Cuando se les enseña desde que son pequeños aprenden a disfrutarlas.
- Como consecuencia de todo lo anterior se obtiene un ambiente mas tranquilo en casa.
¿Cómo crearlas?
Cuando están pequeños, nosotros las crearemos por ellos. A medida van creciendo los irémos involucrando mas.
Por ejemplo, una rutina puede ser la siguiente:

Cuando se ha sido amable y firme en educación, las rutinas que se establecen funcionarán hasta que los niños crezcan un poco y estén listos para ampliar los límites. En este momento hasta los niños más pequeños pueden involucrarse en crear nuevas rutinas que eliminarán los pleitos de las mañanas, de la hora de comer, de la hora de las tareas, de las vacaciones, etc. Se pueden crear rutinas para cualquier momento en el que sintamos que las necesitamos.
Eso sí una vez se crean es muy importante recordar que: El tablero de rutinas es el que dará la pauta.
¿Qué pasa si al niño se le olvida seguirla?
En la mayoría de los casos, el niño está más dispuesto a seguir sus propias rutinas y si se le olvida, se le puede decir ¿Qué sigue en el tablero?
Finalmente hay que dar continuidad para implementarlas actuando de manera amable y firme. Nos referimos a el tablero o lista y se pregunta ¿cuál fue nuestro acuerdo? Resiste a la tentación de rescatar o regañar.
¿Cómo crearlas?
Para este ejemplo vamos a crear una rutina para irse a la cama.
Primer paso
Le pedimos a nuestro hijo que nos diga todas las cosas que necesita antes de irse a dormir, se anota todo lo que nos diga, por disparatadas que parezcan. Si hay algo que creemos que debería de estar pero no se ha mencionado aprovechamos para anotarlo.

Segundo paso
Procedemos a repasar e iremos evaluando las ideas que cumplen con estos 3 requisitos: que sean respetuosas con el niño, con el adulto y con la situación. Las que no cumplen estos 3 requisitos se quitan.
Tercer paso
Una vez tenemos todas, incluidas las que nosotros queremos, le pedimos al niño que nos ayude a ordenarlas y las vamos enumerando y escribiendo en una hoja limpia y en orden.

Acá es adonde puedes usar tú creación: puedes hacer dibujos y que el niño los coloree, poner fotos de él/ella, recortar imágenes, lo que se le ocurra a tu hijo y tu le puedes ayudar.
Es muy importante que tu hijo este de acuerdo con la rutina, esto es lo que lo comprometerá a hacerla. Te recuerdo que mientras más pequeño, nosotros la haremos por el /ella, a medida va creciendo los iremos incluyendo en la toma de decisiones.
¿Y ahora que?
Una vez instaurada la rutina, recuerda hacer seguimiento pero evita sermonear o regañar. Si no cumple un paso, simplemente lleva al niño hacia donde este colocado el cuadro de rutina y pregúntale o recuérdale: ¿Cuál fue nuestro acuerdo?
Ten en cuenta que la resistencia al cambio es algo inherente a la naturaleza humana. Esto lejos de desanimarte, mas bien que te ayude a continuar instaurando la rutina, hasta que la resistencia desaparezca y el niño se acostumbre.
Espero que esto te sirva.
Cualquier duda no dudes en contactarme, con gusto te contesto.